jueves, 9 de enero de 2014

FASE III: SEGUIMIENTO Y CONTROL

FASE III: SEGUIMIENTO Y CONTROL

INTRODUCCIÓN

La Fase III del experimento de teconsuelos de Gardelegi consiste en el seguimiento y control de la evolución de los mismos mediante un programa de muestreos periódicos de cada parcela para su análisis posterior en laboratorio. Los resultados de dichos análisis se contrastarán con la normativa medioambiental vigente, destacando especialmente dos normas autonómicas:
- LEY 1/2005, de 4 de febrero, para la prevención y corrección de la contaminación del suelo.
- DECRETO 49/2009, de 24 de febrero, por el que se regula la eliminación de residuos mediante depósito en vertedero y la ejecución de los rellenos;
además de otros decretos e instrucciones técnicas de aplicación.

Con ello se pretende investigar la evolución en el tiempo de los distintos parámetros fisico-químicos y microorganismos del suelo así como garantizar, de cara a su posible uso en el futuro fuera del vertedero de Gardelegi, que los niveles de dichos parámetros se mantienen en los rangos establecidos en la legislación garantizando así que no se produzcan afecciones al medio ambiente.

PROGRAMA DE SEGUIMIENTO

Una vez finalizada la construcción del tecnosuelos, y tras un primer análisis de control de los tecnosuelos durante su maduración, se inicia un programa de muestreos y análisis sobre el tecnosuelo ya instalado en las parcelas así como de sus lixiviados, control que se prolongará durante 3 años. Las periodicidad de la toma de muestas sobre el suelo será:

Año 1: 6 controles bimensuales.
Año 2: 2 controles semestrales.
Año 3:  1 control anual.

El control de lixiviados durante el primer año se ajustará al control bimensual y a la pluviometría, bien cuando precipiten 150 mm (150 litros/m2) o hayan pasado dos meses desde el último control, lo que ocurra antes. Dicha precipitación corresponde al llenado de la capa drenante (178 litros/m2) que se ubica en la parte inferior de cada parcela de tecnosuelos de modo que los suelos no sufran encharcamiento, dado que las cubetas están impermeabilizadas precisamente para esta recogida de lixiviados.

Además de los parámetros edafológicos se incluyen análisis de metales pesados, compuestos inorgánicos, compuestos orgánicos volátiles, hidrocarburos, pesticidas, microorganismos, ensayos de toxicidad y otros.





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